Column del Aboado, Escritor y Periodista, aAgusto Majia Gonzalez

      Comentarios desactivados en Column del Aboado, Escritor y Periodista, aAgusto Majia Gonzalez

 

Columna del Abogado, Escritor y Periodista, Augusto Mejia Gonzalez ...

Esteban Constaín en un estupendo relato histórico para el tiempo, significó no solo el comienzo de la reunificación Alemana, sino también el fin del bloque Soviético y de la Guerra Fría. Como consecuencia de la derrota de Alemania en la II Guerra Mundial, Constaín rememora que, en Conferencia de Potsdam, entre julio y agosto de 1.945, los 3 grandes: EE.UU, La Unión Soviética y la Gran Bretaña, trataron de establecer una administración funcional de Alemania y su capital Berlín, dividiéndola en cuatro sectores:

Uno Ruso, uno “Americano”, Uno inglés y otro Francés; pero lo que se evidenció fue una disputa a muerte por el futuro de Europa y su equilibrio de poder ( E.T. noviembre 3/2019 pág. 2.1/2.2) y el Muro significaba, en términos políticos, dos concepciones del mundo enfrentadas, el Capitalismo y el Comunismo; dos visiones contrapuestas de la vida.

En 1.947, los dos bloques “trataron de hacer los últimos esfuerzos diplomáticos y militares, para lograr un régimen de Alemania que restaurara la democracia y permitiera reconstruir el país”. No se pudo. En 1.948 se fundaron las dos Repúblicas Alemanas:

La República Federal, en el Occidente y La República Democrática en el Oriente. Los Berlineses se acostumbraron a los trámites burocráticos para el ir y venir entre una mitad y la otra; pero en la mañana del 13 de agosto de 1.961, descubrieron perplejos que, un muro y un alambre de púas, los dividía.

Como muchos alemanes, sobre todo los jóvenes, huían de la República Democrática a la Federal, Walter Ulbricht, presidente del Consejo de Estado, de la R.D.A. le dijo a Nikita Kruschev: “O Usted me ayuda a detener esta hemorragia, o esto se acaba”; y en junio de 1.961, Kruschev le hizo saber a Ulbricht que se había convencido de que el muro sí era fundamental para la supervivencia de la R.D.A. Para Juan Esteban Constaín, aunque la utopía comunista tuvo algunas virtudes, como su devoción por la ciencia y el deporte, y su idea de la educación y de la vida alejada del lucro, resultó un estruendoso fracaso en la práctica.

Recuerda J.E.C. que cuando en 1.857 los entonces juveniles Gabriel García Márquez y Plinio Apuleyo Mendoza visitaron a Luis Villar Borda, quien estaba en Leipzig Alemania, becado por el partido comunista; ante ese paraíso socialista, ya gris y desalmado, Villard Borda, les dijo, derrotado y agotado – y ellos no lograban entender- : “ Miren, yo les sintetizo: Esto es una mierda”. Lo de los Estados Unidos, ya vendrá..…. (Continuará)

AUGUSTO MEJIA GONZÁLEZ