INVASIÓN DE RATAS EN PEREIRA. COLUMNA DEL COMUNICADOR SOCIAL PERIODISTA, RUBÉN DARÍO FRANCO NARVÁEZ. INVESTIGADOR, POETA, HORIENTADOR, COLUMNISTA, ESCRITOR

      Comentarios desactivados en INVASIÓN DE RATAS EN PEREIRA. COLUMNA DEL COMUNICADOR SOCIAL PERIODISTA, RUBÉN DARÍO FRANCO NARVÁEZ. INVESTIGADOR, POETA, HORIENTADOR, COLUMNISTA, ESCRITOR
POR EL PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN DE PERIODISTAS DE RISARALDA (Pri), RUBÉN  DARÍO FRANCO NAVAÉZ, POETA, ESCRITOR COLUMNISTA Y COMUNICADOR SOCIAL –  Notieje.com

LA INVASIÓN DE LAS RATAS

Por: Rubén Darío Franco Narváez

Es tan encantadora nuestra amada ciudad que nadie quiere irse de ella; y, sus hijos ausentes, siempre quieren regresar –aferrados a dulces momentos-.image.png

Estoy seguro que los roedores que están invadiendo las moradas pereiranas, las insaciables Rattus de la familia Muridae, originarias de otros lares; posiblemente llegaron de Asia, antes del arribo a estas tierras del Mariscal Jorge Robledo que el 9 de agosto de 1540 fundó a San Jorge de Cartago.

Hace 25 años, cuando la Biblioteca Pública funcionaba en la antigua Estación del Tren, leí “El cuento de la criada” escrito por la poeta canadiense Margarert Atwood; allí, en ese querido lugar, me grabé la frase: “Una rata que está dentro de un laberinto es libre de ir a cualquier sitio, siempre que permanezca dentro del laberinto.”.

Misteriosamente en muchas residencias pereiranas, están apareciendo –como brotadas de la tierra- una gran cantidad de ratas reales, sin disfraz de terroristas. Sí, estamos siendo víctimas de ellas. Ingresan por las alcantarillas. La única medida, optada por los afectados, es comprar en puestos callejeros -silenciosamente, por ocultar la vergüenza- los famosos raticidas que venden en papeletas a dos mil pesos, con la esperanza de disecarlas.

Realmente… somos pocos los que hemos descubierto el origen de la invasión de ratas a los hogares. -Logré observar detenidamente las obras que se desarrollan para la optimización de redes de alcantarillado, incluyendo renovación, rehabilitación y la expansión del sistema de recolección de aguas residuales. Fueron los propios obreros, quienes señalaron la cantidad de enormes ratas que corrían desesperadas dentro los conductos. Deducción lógica: son los mismos roedores, que están haciendo estragos en nuestras viviendas.

En mis convulsivos sueños, surge en mi memoria “La invasión de las ratas” autoría de James Herbert (escritor best-selller de terror inglés), donde aparece una rata mutante que ataca a los humanos, haciéndolas morir 24 horas después de morderlas.

La verdad es que la gente no se atreve a denunciar la invasión de ratas, tal vez por temor a represalias de las Organizaciones Protectoras de Animales. Prefieren aniquilarlas con los raticidas disecadores que venden en las calles céntricas de nuestra Pereira del alma.

Más Noticias