2018, el turbulento año electoral en Mèxico

      Comentarios desactivados en 2018, el turbulento año electoral en Mèxico
2018, el turbulento año electoral en México
Ricardo Anaya precandidato presidencial.

MEXICO

Este país enfrentará en 2018 unas elecciones reñidas precedidas por múltiples asesinatos a líderes políticos impunes que dejan entrever un panorama turbulento en la medida en que se definan las tendencias electorales de los candidatos y se polaricen las tendencias de voto que hoy encabeza el líder del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador.

AMLO y sus seguidores promueven un cambio de política con enfrentamientos abiertos verbales y de denuncia pública a los que se atribuyen parte de las 20 ejecuciones a gente de sus filas en los últimos dos años: de aspirantes a presidentes municipales a síndicos, regidores, activistas y promotores de voto en Oaxaca, Tabasco, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Zacatecas y Jalisco, estados donde tiene alta popularidad.

Pero aunque Morena encabeza la lista con dirigentes fallecidos de manera violenta, la realidad es que ningún partido escapa de tener al menos un muerto en sus listas con ataques callejeros, sobre sus vehículos, en lugares de trabajo y en la casa. Siempre a quemarropa.

“Me parece que la polarización (social) se dará en la medida en que haya al menos dos candidatos en condiciones de ganar la elección, porque si uno solo toma delantera sin contendientes de peligro, los ataques que le propinen serán poco relevantes’’, advirtió Nicolás Loza, analista político de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).

Hasta ahora, López Obrador,  quien compite desde la izquierda por tercera ocasión, se mantiene favorito, sin embargo, tanto en 2006 como en 2012 sus tendencias se fueron a la baja en la medida en que entraron en juego otros factores.

Para esta ocasión, el analista Loza prevé dos escenarios. El primero es que los votos se fraccionen por la derecha entre el PRI, (con José Antonio Meade al frente), el Frente por México (empujado por PAN, PRD y Movimiento Ciudadano con el panista Ricardo Anaya) y algún independiente como Jaime Rodriguez “El Bronco‘‘ o Margarita Zavala y esto favorezca a “El Peje“, como se le conoce popularmente a López Obrador.

El segundo es que alguno de los candidatos de derecha logre pronto (antes de mayo o incluso junio) una intención de voto por arriba de 25%, y los otros dos, vayan a la baja, aunque sea moderadamente, para dejar un escenario de disputa entre AMLO y el más popular de los otros.

“Podría ser que algunos panistas antipriístas, o priístas antipanistas, tengan que  elegir entre dos sopas amargas y elijan la menos amarga entre las dos. Este es un escenario de polarización, nada improbable’’, detalló Loza.

Este último caso, con sus respectivos matices, ocurrió en las elecciones presidenciales previas y trajo consigo un ambiente hostil entre la sociedad de todo el país con sus respectivos costos mortales y económicos , una situación que, a ojos de los politólogos, debería evitarse. Más aún, en tiempos de internet, donde las campañas negativas crecen.

Jorge Javier Romero, analista de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), detalló que los pros y contra de los candidatos son los mismos: anuncian combate a la corrupción, mejoras económicas, acabar con la inseguridad pero no presentan proyectos de reformas que combatan de manera institucional los problemas, sino meras promesa personales, “si yo no soy corrupto la corrupción se acabará en cascada’’.

En el caso de AMLO, apunta,  “él dice que va a ser honrado pero no hay una propuesta de desarrollo social o de respeto a derechos universales o contra la impunidad y ni siquiera se sabe que va a hacer exactamente con la inseguridad, más bien, responde con ocurrencias’’.  Meade, por su parte, “es claro que no va acabar con los pactos de impunidad’’ y Anaya, “es un listo, un astuto’’ que supo llevarse la candidatura pero nada más.

“Lo que hace falta una sociedad más organizada que exijan proyectos de reforma serios en lugar de consentir a partidos que en el fondo quieren lo mismo: ganar para responder a sus clientelas y gente, llámense sindicatos, patrocinadores corporativos o grupos de poder’’, advirtió.

Más Noticias